

Mi cita concertada de anoche fue, sencillamente espectacular. Fui la compañera y amante de un hombre atractivo, sexy, maduro, experimentado… Cuando lo vi vestido con aquel traje de chaqueta azul marino ajustado a su musculado cuerpo, mi entrepierna empezó a mandarme señales, quería hacerme saber cuánto le estaba gustando lo que veía.
Realmente era todo un portento de hombre de los … Leer más